Ya sea la de una planta, una mascota o un pariente, es posible que tu niño enfrente alguna muerte. Puede que se te dificulte el saber qué decir cuando la muerte ocurre, y hay una buena razón para eso. Los niños pequeños son muy jóvenes para realmente entender la muerte, así que el tratar de explicar lo que le sucedió a un abuelo o a una mascota es complicado. Pero, a pesar de que un entendimiento de la muerte no se comprenderá hasta los 4 o 5 años, aun así tu niño pequeño entendió que ahora algo es diferente.
En este artículo te guiaremos por consejos de expertos para abordar este delicado tema con tu pequeño.
Consejos para orientar a tu niño pequeño durante una muerte
Mantenlo simple y directo
Los niños pequeños están conectados a las emociones de los principales adultos de sus vidas, así que es importante reconocer que algo ha sucedido. En un intento comprensible de no afectar a tu pequeño, es posible que busques eufemismos para explicar la muerte. Tocó “dormir” al perro, el abuelo “ya no está acá” o la tía María “se fue de vacaciones por un largo tiempo”.
Rosemarie Truglio, psicóloga del desarrollo y vicepresidente de investigación de Sesame Workshop, explica que estas suaves representaciones de la muerte en realidad pueden confundir o incluso, asustar a los niños pequeños. Esto es especialmente cierto para la palabra “dormir”. Tener que “dormir” al perro o decir que la abuela “se fue a dormir para siempre” en realidad pueden generar miedo en los niños pequeños, puesto que dormir es parte de la rutina diaria.
Truglio dice que es importante ser directo y usar términos concretos. “Cuando te mueres, tu corazón se detiene, tu cuerpo deja de funcionar. Cuando tu cuerpo deja de funcionar, no puedes comer, no puedes respirar y ya no puedes hablar.” Si bien, enunciados como estos pueden asustar a los padres, son menos confusos para un niño pequeño.
Recuérdales con sutileza
Los niños pequeños digieren esta información en pedazos, puesto que sus habilidades de la memoria aún se están desarrollando. Después de explicarle con claridad lo que le sucedió al abuelo, no debe sorprenderte si tu niño pregunta. “¿Donde está el abuelo?” dos días después. Los niños necesitan tiempo y recordatorios sutiles de que alguien cercano ya no está.
Está bien llorar
Truglio explica que es importante que los niños vean a su padres de luto. “Vamos a llorar y creo que debes explicar por qué estás llorando.” El compartir los momentos emocionales con tu niño puede ser reconfortante y sanador para los dos.
Expresa gratitud
Expresa gratitud de haber conocido a la persona o mascota que ha muerto. “Yo sé que estamos tristes ahora, pero me da mucha felicidad el habernos divertido tanto con Max. Tuvimos la oportunidad de quererlo, consentirlo y jugar con él. Nunca lo olvidaremos.” Esto le trae positivismo, amor y apreciación a la conversación sobre la muerte.
Rodéalos de amor
Un sistema de apoyo es fundamental en estas situaciones, hasta para un niño pequeño. Cuando sufren una perdida, es sumamente importante que se sientan cuidados y amados. Pasar tiempo valioso contigo y otros seres amados puede marcar una gran diferencia en la manera cómo perciben la muerte.
Lean juntos
Los libros para niños siempre son una buena manera para presentarles temas emocionales a los pequeños. Estas son alguna recomendaciones que son adecuadas para niños pequeños:
- Something Very Sad Happened por Bonnie Zucker
- Tim’s Goodbye por Steven Salerno
- The Goodbye Book por Todd Parr
A pesar de que los niños pequeños no entiendan la muerte, todavía tenemos que abordarla con ellos. Compartir emociones y explicaciones claras puede ayudar a facilitarles el entendimiento del ciclo de la vida.